Internet de las cosas. Foto Pixabay.

El término Internet de las Cosas, IoT por sus siglas en inglés, lleva tiempo instalado en la sociedad. Conectar las cosas cotidianas con Internet supone, y supondrá en un futuro, todo un avance para los usuarios. Aunque, por el momento, IoT no es una parte regular del día a día de las personas, lo cierto es que está más presente de lo que se piensa en nuestras vidas. De hecho, la aplicación de esta tecnología en las administraciones públicas ha mejorado, por ejemplo, los sistemas de transporte, así como la eficiencia energética o la gestión de residuos en las ciudades. Una serie de adelantos que llegan al ámbito de las personas, y que se materializan también en aplicaciones revolucionarias para interpretar mejor el entorno y ser más proactivos en nuestras decisiones y actuaciones.

En cualquier caso, si bien es cierto que la mayoría de la sociedad cuenta con una idea más o menos precisa sobre qué es IoT, el paso de estos servicios al ámbito residencial se resiste, aunque, como veíamos, se trata de una barrera que poco a poco va rompiéndose. “Estamos en un momento de evolución tecnológica hacia esa capacidad de ofrecer una experiencia al consumidor ágil, conveniente y completa”, asegura Vicente Muñoz, Chief IoT Officer en Telefónica y máximo responsable del área de Internet of Things en la compañía. Y en este escenario, Vicente, que es además un referente en transformación de experiencia del cliente y en Digital Signage, está convencido de que 2018 será el año que complete las nuevas conectividades necesarias que permitan ofrecer servicios más completos y poder así explosionar los servicios de IOT en el ámbito residencial.

Internet de las Cosas es ya una realidad

Incidiendo en esta primera idea, el informe Things Matter presentado por Telefónica en noviembre de 2017 demostró que se usa IoT más de lo que se conoce. Los usuarios se sienten seguros y cómodos con esta experiencia, donde la única barrera es el desconocimiento todavía existente. Tan solo el 45% de los encuestados conocía el término frente a un 84% que, aunque no sepa la definición exacta, sí sabe de casos en los que se aplica dicha tecnología.

“El Internet de las Cosas es ya una realidad”, asegura Vicente Muñoz. Y en este escenario no duda en señalar que “se ha producido un cambio de mentalidad de los clientes que, cada vez más, buscan la conectividad”. Y es que, Muñoz entiende la apuesta por IoT como un “viaje compartido” entre quienes habilitan la transformación digital y los clientes a los que se ayuda a “co-crear nuevas soluciones, modificar algunos de sus procesos esenciales aportando conectividad global, expandir sus negocios internacionalmente, y crecer conjuntamente para construir una relación duradera”.

Un despliegue posible en más casos

Un viaje donde el cambio de mentalidad del usuario ha desembocado en una transformación constante y en la llegada de toda una serie de nuevas tecnologías como NB-IoT y LTE-M para favorecer la evolución de dispositivos IoT y reducir así tanto los costes como los problemas asociados “para que el despliegue sea posible en más casos”.

“Teniendo en cuenta todas estas nuevas adopciones, el número de conexiones nuevas que habilitamos en Telefónica cada año se multiplica y se espera una masificación de las cosas conectadas en los próximos años. Tanto es así que, según Machina Research, en 2025 esperamos alcanzar 27.000 millones de objetos conectados, se generarán 2 zettabytes de datos y una oportunidad de ingresos de 3 billones de dólares”, asegura el Chief IoT Officer de la compañía.

Una nueva revolución tecnológica

IoT es sinónimo de avance y de futuro, y la industria lo sabe. Por ello, la apuesta por esta tecnología es cada vez mayor y abarca más sectores. Se trata de “una revolución que ya está pasando y está transformando nuestra vida en todos los escenarios que nos rodean cada día”, asegura Muñoz, quien destaca también el papel transversal que las soluciones IoT aportan a los distintos ámbitos de la actividad de las empresas, la Administración y las personas.

Dentro de la industria, Vicente Muñoz ve en los sectores de fuertes inversiones a “los más interesados en adoptar tecnología para mejorar sus procesos”, y destaca la llegada del coche conectado como el escenario perfecto para demostrar la conectividad IoT.

En lo que se refiere al ámbito empresarial, “IoT está provocando la disrupción en los modelos de negocio, creando nuevas líneas de ingresos y fórmulas de consumo diferentes para los clientes”, resalta el Chief IoT Officer de Telefónica, que encuentra en estos cambios la llegada de “nuevas funcionalidades que aportan valor añadido y diferenciación frente a otras ofertas del mercado”.

Actividades clave en el avance de nuevas conectividades

2017 fue el año de la consolidación de IoT en Telefónica, cuyos datos de crecimiento superaron el 30% interanual. Una cifra que hace a Muñoz calificar de “muy positivo el balance de la compañía tanto en términos de crecimiento del volumen de negocio como de expansión” a través de sus diferentes mercados de operación.

Un crecimiento que se ha producido de “forma relevante” en el segmento de empresas a través de su Plataforma de Conectividad IoT, pero que también se ha producido en “la generación de sectores verticales de especial relevancia para los ámbitos industriales, como energía o retail y para la Administración Pública, como smart cities”, resalta al respecto el Chief IoT Officer de Telefónica.

Un progreso que también ha tenido lugar en los ámbitos de la tecnología y la innovación, con la realización de “actividades clave en el avance de nuevas conectividades (NB-IoT, LTE-M) y en el desarrollo del ecosistema IoT, con The Thinx a la cabeza”.

Toda una serie de perfeccionamientos que han llevado a Telefónica a liderar el Cuadrante Mágico de Gartner por cuarto año consecutivo en este entorno. “Es una forma de reconocer toda nuestra labor del día a día y constatar que estamos yendo por el buen camino”, matiza Muñoz en referencia a tal logro.

Y en este punto Vicente hace hincapié en la importancia de la “sensorización” de las cosas alrededor del usuario, que considera que “será masiva gracias a las nuevas tecnologías de conectividad LPWA”. Una visión y un escenario de futuro que viajan en consonancia con la idea de “conectar a las personas con las cosas que les importan”. “Vamos a apostar fuertemente construyendo una propuesta de valor madura y potente tecnológicamente para ayudar a nuestros clientes a conectar todas las cosas de su vida y relacionarse mejor y de manera más completa con ellas”, confirma.

La seguridad, una barrera destructible

Una de las barreras para la estandarización del IoT tiene que ver con la necesidad de garantizar la seguridad E2E en las soluciones que se ofrecen a los clientes. Para ello, Telefónica cuenta con una empresa especializada en seguridad, ElevenPaths, a través de cuyos productos, “se ofrece la posibilidad de securizar la infraestructura y dispositivos de los clientes de forma eficiente”. Y es que, como Muñoz entiende, “la seguridad de los datos es imprescindible en este nuevo universo que se está abriendo con IoT, en donde cada vez van a ser más numerosas las líneas de conectividad que interactúan a la vez”.

Pero la seguridad sigue siendo una cuestión compleja para los clientes que necesitan de una base alta de confianza para lanzarse al mundo del IoT. “Ayudarles a securizar sus soluciones extremo a extremo” es la solución que Vicente Muñoz propone, “basándose en la red y aplicando técnicas de aprendizaje automático”. Se trata de una fórmula sencilla con la que ofrecer a los clientes seguridad por defecto con tan solo acceder a la Plataforma de Conectividad IoT de Telefónica; sin necesidad de modificar dispositivos o sistemas.

“La ventaja de estas soluciones es que la red no miente: si un dispositivo está comprometido, su comportamiento será distinto y podemos prevenirlo, detectarlo y reaccionar a tiempo”, asegura el experto en IoT.

Tendencias de futuro

Y si hablamos de tendencias que marcarán en este 2018 el futuro del IoT, citando al Presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, Muñoz asegura que “no es una época de cambio, es un cambio de época”.

Y en este sentido, las tendencias “girarán en torno al desarrollo de las necesidades de los clientes particulares, enfocándose en casos de uso muy concretos donde este público accederá a propuestas de valor orientadas a ellos”. Por este motivo, Telefónica apostará por consolidar el IoT como “uno de los motores de crecimiento del grupo, reforzando el incremento de los negocios core apalancándose en su Plataforma de Conectividad IoT”, asegura Muñoz.

Pero existen también otras tendencias que por su impacto cercano, “y especialmente por su efecto transformador”, se han convertido también en la apuesta de Telefónica. Entre ellas, la aceleración de los despliegues LPWA, eSim, como dinamizador global para IoT; los drones; la seguridad combinada con Blockchain; Edge Computing para reducir la latencia y optimizar el consumo de banda ancha; una mejora de la gestión y optimización de dispositivos para empresas; la voz, entendida como la interfaz del futuro; y el Big Data.

Al final, todo un viaje al futuro donde IoT se convertirá en una de las apuestas más grandes y consolidadas de la tecnología a nivel mundial, y de Telefónica en particular.