Esta cifra es el resultado de la contratación de servicios, el pago de impuestos y los salarios de los cerca de 200 trabajadores que la empresa emplea de forma directa, además de otros conceptos y los efectos derivados del empleo indirecto.
Estas cifras ratifican el compromiso que mantiene la compañía con los habitantes de Alcalá de Guadaíra y sus alrededores desde hace casi cinco décadas, configurándose como un destacado motor económico que, además de generar empleo, ha realizado importantes inversiones en la modernización de sus instalaciones productivas a fin de incrementar su productividad y satisfacer, al mismo tiempo, las demandas de sostenibilidad y respeto al medioambiente de la sociedad actual.
Este impacto económico responde al fuerte arraigo local de esta industria cementera que, además, se ve reforzado con actuaciones encaminadas a lograr mayores beneficios sociales y medioambientales a través de iniciativas de Responsabilidad Social Corporativa, la implantación de sistemas de gestión de calidad, medioambiente y prevención de riesgos laborales y su apuesta por la sostenibilidad, tanto en la reducción de emisiones como en su potencial a la hora de aprovechar los residuos no reciclables.
Cementos Portland Valderrivas
La fábrica de Alcalá de Guadaíra pertenece al Grupo Cementos Portland Valderrivas, multinacional líder en la producción de cemento, hormigón, áridos y mortero, que utiliza en todos sus procesos productivos las más avanzadas tecnologías para conseguir la optimización económica y un respetuoso cuidado del medioambiente. Esta planta cuenta con una capacidad actual de producción de cemento de en torno a los 2 millones de toneladas anuales.
Diamantes cultivados en laboratorio formados sin apretar en un líquido de galio, hierro, níquel y silicio.
Tres ciudades europeas muestran cómo el arte y la cultura pueden contribuir a crear barrios bellos, sostenibles e inclusivos.
La unión de ribavirina y remdesivir consigue eliminar de forma rápida el virus al inducir un exceso de mutaciones en su genoma que le impiden multiplicarse con eficacia.
La preocupación hacia los nano y microplásticos y su impacto en el medio ambiente y la salud de los organismos vivos ha aumentado considerablemente. Actualmente, no existe una metodología de análisis estandarizada para estudiar la presencia de estos, pero las autoridades ya comienzan a restringirlos. Además, existe un obstáculo clave que impide realizar las pruebas oportunas sobre los micro y nano materiales: la disponibilidad limitada de materiales caracterizados y trazables biológicamente. Por tanto, para poder continuar con esta línea de investigación es necesario disponer de partículas que sirvan de referencia, es decir, que conserven la naturaleza química del material y que tengan el tamaño de partícula adecuado.
AIMPLAS avanza en nuevas tecnologías para la descarbonización y la transición energética de la industria y el transporte, a través de dos proyectos de investigación y desarrollo financiados por el Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (IVACE+i) y los fondos FEDER.
El equipo del proyecto MMAtwo, financiado con fondos europeos, presentó una tecnología para procesar residuos de polimetacrilato de metilo y convertirlos en materiales utilizables en una segunda vida.