Ecopetrol informa que probó la presencia de petróleo crudo en el pozo exploratorio Pastinaca 1, ubicado en jurisdicción del municipio de Puerto López, departamento del Meta, al noreste de la población de San Carlos de Guaroa.
El pozo hace parte del Contrato de Exploración y Producción CPO-10, suscrito entre Ecopetrol y la Agencia Nacional de Hidrocarburos el 18 de Diciembre de 2008.
La perforación de este pozo culminó el pasado 17 de enero de 2013, a una profundidad total de 7.870 pies, que equivalen a 2,4 kilómetros bajo la superficie. En la perforación se detectó arenas con hidrocarburos en un espesor neto de 30 pies.
Las pruebas iniciales realizadas en el pozo Pastinaca-1, en las que se usó levantamiento artificial de tipo electrosumergible, arrojaron una producción promedio de petróleo crudo de 202 barriles de petróleo por día (BPD) de 11,7° API (crudo pesado) y un corte de agua del 80%. La producción acumulada supera a la fecha los 1.448 barriles de petróleo.
El pozo Pastinaca-1 es el primer hallazgo de hidrocarburos en un pozo 100% de Ecopetrol en lo corrido del año 2013. La Empresa continuará las labores exploratorias en el bloque CP0-10 durante los próximos meses.
Este hallazgo confirma el potencial de los Llanos Orientales, especialmente en el departamento del Meta, en donde se han concentrado los más recientes descubrimientos de Ecopetrol en bloques como CPO-9 y Caño Sur, con los pozos exploratorios Akacias, Embrujo, Trasgo, Mito y Fauno, entre otros.
En la actualidad, en el departamento del Meta se está produciendo alrededor del 55% del petróleo que extraen Ecopetrol y sus socios, principalmente en los campos Castilla, Chichimene y Rubiales. En esta zona del país se concentra el desarrollo de los crudos pesados, uno de los ejes de la estrategia para aumentar la producción y reservas de petróleo durante los próximos años.
La operación afecta a los grupos armados dedicados al apoderamiento de hidrocarburos con fines de narcotráfico.
Investigadores de la Universidad de León han aplicado redes neuronales artificiales a imágenes captadas con drones para reconocer, con un 95 % de acierto, la huella que dejaron las explotaciones auríferas de los romanos en el noroeste peninsular. El sistema se puede aplicar para reducir los riesgos asociados a las minas abandonadas, que causan pérdidas humanas y económicas en todo el mundo.
La empresa productora de cobre en nuestro país avanzó 23 lugares en la medición, siendo una de las tres compañías de todo el listado con mayor avance en la edición 2023 del ranking.
Las industrias extractivas han jugado un rol significativo en la región andina desde la época colonial. La configuración de la economía y la sociedad ha estado ligada directamente a las vastas reservas de recursos naturales y al desarrollo de actividades extractivas que atraen inversiones, impulsando el desarrollo socioeconómico. Además, este sector representa un porcentaje importante en las exportaciones y tiene un gran impacto en los ingresos fiscales.
La aplicación de nanopartículas, imperceptibles al ojo humano, pero hechas a partir de tierras raras y metales como níquel, hierro y cobalto, facilitaría la extracción de crudos pesados y extrapesados, que representan el 70 % de las reservas mundiales, reduce hasta un 60 % el agua requerida, disminuye el consumo de energía y en el proceso genera hidrógeno, uno de los elementos más importantes para la transición energética.
Un proyecto de biominería de la Universidad Andrés Bello y la Universidad de Chile permitiría lograrlo de forma más limpia, con menor impacto social y reduciendo riesgos ambientales que hoy representan los depósitos de relaves mineros.