La mayoría de las plagas tienen diferentes enemigos naturales, y e l control biológico es una disciplina que busca restablecer ese equilibrio natural, mediante la implementación de diferentes técnicas.
Estudiar estas relaciones entre organismos, permite conocerlos e introducirlos en planes de manejo integrado de plagas. Es así, como mediante la utilización de organismos benéficos, es decir, los que atacan a los insectos que causan perdidas en los cultivos, se pueden disminuir de manera eficiente y ecológica las poblaciones de plagas y obtener además del beneficio de su control, menos contaminación del ambiente, menor riesgo de resistencia de las plagas a los agroquímicos y establecimiento de dichos organismos benéficos en los sistemas de producción agrícola.
En el país existen abundantes ejemplos exitosos de aplicación del control biológico, pudiendo hacer referencia al empleo de avispas parasitoides de huevos Trichogramma spp. para el manejo de poblaciones de Diatraea saccharalis en cultivos de caña de azúcar, además del uso en este sistema de producción de otros agentes como las moscas taquinidas Lidella (Metagonistylum) minense y Paratheresia claripalpis. Otro caso es el empleo de microorganismos patogénicos como el Baculovirus para el manejo de el Erinnyis ello (cachón de la yuca) biocontrolador de larvas de este lepidóptero defoliador de yuca. Además de los anteriores ejemplos en el país existen otros en cultivos como algodón, forestales, flores, etc. Lo anterior pone en evidencia que nuestro país por su alta biodiversidad (10% de insectos del planeta) presenta un gran potencial biológico para el desarrollo de esta área del conocimiento.
UNISARC en sus 30 años de trayectoria académica se ha preocupado por contribuir en la producción ecológica y limpia, de forma tal que ha hecho trasversal en su currículo, la importancia de la adopción del control biológico, como una de las estrategias en la regulación de poblaciones de insectos plaga. Así pues, desde el programa de agronomía se pretende formar profesionales consientes de su papel en la producción limpia de cultivos a través de una línea de profundización en control biológico, desde donde se prepara al futuro profesional en estrategias de producción y conservación de enemigos naturales asociados a insectos y organismos que atacan los cultivos, además se ofrece un programa de posgrado a nivel de especialización en Control Biológico, el cual es un programa único en la región y el país, de amplia vigencia académica y pertinencia en el sector agropecuario.
Dentro de los procesos de investigación formativa que se desarrollan en Unisarc, existen trabajos de investigación desde el aula encaminados a explorar potenciales agentes de control biológico (enemigos naturales y extractos, entre otros), se desarrollan trabajos de grado en el pregrado de agronomía y en la especialización, enfocados principalmente en tres líneas de investigación, producción de extractos vegetales, producción de microorganismos biocontroladores y producción de entomófagos. Lo anterior posiciona a la Universidad como pionera en formación en control biológico para la ecoregion cafetera. UNISARC se proyecta como una institución que a través de la investigación básica y aplicada, estudia los organismos agentes de control biológico, desarrolla sus métodos de cría y transfiere dicho conocimiento a la comunidad rural. Como resultado de sus investigaciones y del ejercicio académico UNISARC trabaja con los principales actores en control biológico de la región (empresas productoras de insumos biológicos, agricultores y profesionales del sector), para generar alternativas de manejo de plagas acorde con las necesidades regionales y enmarcadas en una tendencia de agricultura limpia.
Un equipo científico del IEO-CSIC ha analizado cómo ha variado la distribución de 102 especies demersales en respuesta al cambio climático
La candidata a doctorado Emma Bullock estudia los impactos locales y globales de los cambios en los niveles minerales en las aguas subterráneas del Ártico.
Hasta ahora, se pensaba que los únicos organismos "fijadores de nitrógeno" eran los procariotas, como las bacterias.
Un chinche de 3 mm no registrado por la ciencia sería útil para controlar el crecimiento del maracuyá silvestre ("Passiflora foetida"), un tipo de maleza que en países como Australia es considerada como invasora pues obstaculiza el paso en las playas e impide el crecimiento de otras plantas autóctonas. Este insecto sería un controlador natural porque completa su ciclo de vida sobre la planta y se alimenta de las hojas causándoles daño.
El vuelo de los insectos, el camuflaje de los pulpos y la cognición humana son tres ejemplos de innovación evolutiva que se basaron, en parte, en eventos de duplicación de genes hace cientos de millones de años.
Un estudio pionero liderado por el CSIC analiza la exposición de los hábitats europeos al impacto de 94 especies de animales y plantas invasoras e identifica regiones críticas para la conservación.