IBM y un grupo de instituciones han presentado esta semana en París el proyecto Call for Code, en un esfuerzo por unir a desarrolladores de start-ups, empresas y universidades para prevenir, responder y recuperarse de catástrofes con la ayuda de las nuevas tecnologías.
Se trata de impulsar nuevos desarrollos con tecnologías como el análisis de datos, inteligencia artificial e internet de las cosas para abordar desafíos sociales
Durante una charla magistral en la Conferencia VivaTech, la presidenta y consejera delegada de IBM, Ginni Rometty, ha hecho un llamamiento a la industria para ayudar a construir un futuro mejor. Rometty ha comprometido la tecnología de la firma y una inversión de 30 millones de dólares (26,5 millones de euros) en la iniciativa.
El objetivo, según Rometty, "es dar un impulso a nuevos desarrollos mediante tecnologías como el análisis de datos, las tecnologías de inteligencia artificial, el blockchain, la computación en la nube y el internet de las cosas para abordar diferentes desafíos sociales".
A través de Call for Code , IBM y la organización David Clark Cause colaborarán con la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para asegurar la participación de los grupos afectados en su preparación, respuesta y esfuerzos de recuperación, y en atraer la atención hacia las poblaciones más excluidas y marginadas.
Según Laurent Sauveur, director de relaciones externas de la Oficina de Derechos Humanos la ONU "se trata de una gran oportunidad para explorar cómo la tecnología puede tener un papel en la solución de los problemas de las poblaciones más vulnerables y de aquellos que están en riesgo de que sus derechos humanos se vean afectados en el contexto de las crisis humanitarias”.
Récord de desastres naturales en 2017
La iniciativa también integra la estrategia de Cruz Roja América que busca nuevas vía para dar apoyo a las víctimas de desastres, especialmente teniendo en cuenta que 2017 ha sido uno de los peores años en número de catástrofes, incluyendo fuegos, inundaciones, terremotos y tormentas.
“Responder a desastres nacionales e internacionales de gran escala es un trabajo de equipo, y estamos entusiasmados con la idea de aprovechar conocimientos y puntos de vista de la industria tecnológica para enfrentarnos a los desafíos globales”, afirmó Brad Kieserman, vicepresidente de los Servicios de Desastre de Cruz Roja América. “Acuerdos y tecnologías como estos permiten responder de manera más inteligente, lo que es crítico para ayudar a aquellos que lo necesitan de manera rápida y eficaz”.
La iniciativa cuenta con una financiación de 26,5 millones de euros por parte de IBM
Call for Code invita a los desarrolladores a crear nuevas aplicaciones que ayuden a las personas y a las comunidades a estar más preparados ante los desastres naturales.
Por ejemplo, podrían crear una aplicación que use datos del tiempo e información de la cadena de suministro para alertar a las farmacias de la necesidad de que aumenten sus existencias de medicinas, agua embotellada u otros artículos basándose en la predicción de mal tiempo. O construir otra que prediga cuándo y dónde los desastres podrían ser más severos, de modo que los equipos de emergencia pueda llegar antes de tiempo y en un número adecuado para tratar a los afectados.
La inversión de IBM financiará el acceso a herramientas de desarrollo, tecnologías, código gratuito y formación con expertos. El equipo ganador recibirá un premio económico y tendrán acceso a asesoramiento a largo plazo para mover su idea de prototipo a una aplicación para el mundo real. Esto incluye asesoramiento de manera continuada por parte de la Fundación Linux a los desarrolladores
Además, el grupo ganador puede pasar a formar parte de los equipos del programa de Responsabilidad Social Corporativa de IBM “Corporate Service Corps”, (CSC) para aplicar su solución, con la ayuda de expertos de IBM, en beneficio de una entidad local.
Los equipos de IBM CSC son multidisciplinares y están formados por expertos de la empresa que pasan entre cuatro y seis semanas en comunidades desatendidas en todo el mundo aplicando tecnología para ayudar a resolver los problemas locales.
El Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC) es la primera agencia pública de ámbito estatal especializada en información sobre ciencia, tecnología e innovación en español. Fue puesta en marcha por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología en el año 2008. El equipo de SINC produce noticias, reportajes, entrevistas y materiales audiovisuales (vídeos, fotografías, ilustraciones e infografías).
Desde 1950, con el artículo de Alan Turing Maquinaria informática e inteligencia y la publicación de la novela Yo, robot de Isaac Asimov, la Inteligencia Artificial viene evolucionando año tras año de forma más rápida.
Mientras la NASA se centra en explorar la Luna, Marte y el sistema solar en beneficio de la humanidad, la Dirección de Misiones de Tecnología Espacial (STMD) de la agencia está cambiando la forma en que prioriza el desarrollo tecnológico. Como parte de este esfuerzo de refinamiento, la NASA está pidiendo a la comunidad aeroespacial estadounidense comentarios sobre casi 190 necesidades (o deficiencias) de tecnología espacial nacional que ha identificado para futuros esfuerzos científicos y de exploración espacial.
Un trabajo del Instituto de Análisis Económico (IAE-CSIC) analiza la edad, género, formación y procedencia de los autores de más de 700 grandes hallazgos científicos desde 1600 hasta la actualidad
El International Science Council (ISC), organización no gubernamental creada en 2018, promueve la ciencia como bien público global, respaldando la universalidad del conocimiento científico. A través de una política científica, busca mejorar la publicación académica en la era digital, basándose en 8 principios para la publicación científica, que incluyen acceso abierto, revisión rigurosa y garantía de acceso para futuras generaciones.
Después de exponerlos a un proceso químico se encontró que el cobre y el níquel inhibieron con éxito el crecimiento de "Bacillus cereus" y "Staphylococcus aureus", bacterias con cepas resistentes a los antibióticos y relacionadas con enfermedades de transmisión alimentaria (toxiinfecciones). El hallazgo permitiría pensar en nuevos tratamientos farmacológicos o en la elaboración de empaques especiales que protejan productos como carnes y verduras.
El bosón W es, junto al Z, una de las partículas responsables de la mediación que tiene lugar en la interacción nuclear débil, que es una de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza junto a la interacción electromagnética, la gravedad y la interacción nuclear fuerte. Los físicos suelen colocar a este mismo nivel el campo de Higgs, que es otra interacción fundamental que explica cómo las partículas adquieren su masa, pero para facilitar su comprensión los textos suelen recoger como fuerzas fundamentales las cuatro que acabo de mencionar.