La línea de aditivos Smart Additives consigue mejorar la matriz del hormigón, incrementar sus características mecánicas y aumentar su vida útil, dando lugar a hormigones 2.0. y haciendo posible construcciones más resistentes y duraderas.
Dentro de Smart Additives se pueden encontrar 7 gamas de aditivos, dependiendo del tipo de hormigón a utilizar y de las características que se esperen conseguir de él:
- Solid MECHANIC, está pensado para su uso en hormigones en planta u hormigones preparados. El resultado son hormigones de altas prestaciones, con gran calidad, resistencia y acabado superficial.
- Solid PRECAST, ideal para el mundo del prefabricado. Estos aditivos mejoran la calidad y el proceso productivo, reduciendo los costes y aumentando al máximo la eficiencia de los hormigones.
- Solid HARD, indicado para hormigones expuestos a agresiones extremas. Los hormigones resultantes son altamente durables y con permeabilidad reducida.
- Solid SUPPORT, productos complementarios para el ajuste y modificación de las líneas de Smart Additives.
- Solid DRY, adecuado para la fabricación de hormigones semisecos.
- Solid GUNITE, especialmente para la fabricación de hormigones proyectados.
- Solid FIBER, línea de fibras para sustitución o reducción del armado en el hormigón fresco. Compatible con toda la gama Smart Additives.
Estos aditivos Smart Additives ya están siendo probados con éxito en varios proyectos tanto en España como en países extranjeros, como México, Estados Unidos o Marruecos.
El grafeno en la construcción con hormigón
En el sector del hormigón, el grafeno es idóneo como material de uso estructural, pues actúa como una malla molecular que da soporte estructural a las edificaciones.
El grafeno es un nanomaterial de carbono más fuerte que el acero y más duro que el diamante, con capacidad para soportar grandes cargas y absorber energía antes de romperse. Por ello, los hormigones que lo contienen son más resistentes a la tracción, compresión y desgaste. Además, son hormigones de alta flexibilidad y ductilidad que retrasan la aparición de grietas y fisuras, lo que los hace ideales frente a sismos y otros desastres naturales. Las construcciones realizadas con estos hormigones aditivados con grafeno pueden aumentar su vida útil hasta 50 años más que las actuales.
Más información en la web de Graphenano Smart Materials.
La preocupación hacia los nano y microplásticos y su impacto en el medio ambiente y la salud de los organismos vivos ha aumentado considerablemente. Actualmente, no existe una metodología de análisis estandarizada para estudiar la presencia de estos, pero las autoridades ya comienzan a restringirlos. Además, existe un obstáculo clave que impide realizar las pruebas oportunas sobre los micro y nano materiales: la disponibilidad limitada de materiales caracterizados y trazables biológicamente. Por tanto, para poder continuar con esta línea de investigación es necesario disponer de partículas que sirvan de referencia, es decir, que conserven la naturaleza química del material y que tengan el tamaño de partícula adecuado.
AIMPLAS avanza en nuevas tecnologías para la descarbonización y la transición energética de la industria y el transporte, a través de dos proyectos de investigación y desarrollo financiados por el Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (IVACE+i) y los fondos FEDER.
El equipo del proyecto MMAtwo, financiado con fondos europeos, presentó una tecnología para procesar residuos de polimetacrilato de metilo y convertirlos en materiales utilizables en una segunda vida.
El biomaterial desarrollado por el ICMM-CSIC se combina con campos magnéticos para crear una matriz que permitirá la colonización por células neurales de las zonas dañadas de la médula espinal.
Una mezcla de dicho fosfato cálcico -el cristal principal de huesos y dientes, que les confiere su dureza característica- y dióxido de titanio, puesta sobre láminas de metal de titanio, demostró tener una valiosa propiedad magnética que, al activarse con los rayos ultravioleta (UV) o energía solar, resulta muy útil en la eliminación o clarificación del agua contaminada con clorhexidina, sustancia presente en jabones líquidos, utilizados especialmente en entornos hospitalarios.
Mediante cámaras que recrean las fisuras de las rocas, investigadores alemanes han demostrado cómo los flujos de calor subterráneos pudieron enriquecer los componentes prebióticos y aumentar su reactividad, favoreciendo la aparición de los primeros organismos vivos.