Implementar los modelos fluvial y férreo disminuiría hasta en un 41 % los niveles de dióxido de carbono, que se emiten en un 25 % por el transporte de carga.

Dicho sector es el de mayor longitud entre estaciones, con cerca de 223 km entre una y otra. “Allí se genera cerca del 25 % de todas las emisiones de la Ruta del Sol, debido a que el tráfico de camiones aumenta en La Jagua de Ibirico por la mina Drummond, ubicada en Cesar”, señala el ingeniero.

La Ruta del Sol atraviesa 22 municipios de nueve departamentos y su propósito es conectar Bogotá con la Ye de Ciénaga en un tiempo estimado de 10 horas para carros y 14 horas para vehículos de carga.

Datos del Ministerio de Transporte indican que cerca de tres millones de camiones transitan por esta vía al año, vehículos que arrojan el mayor número de emisiones en el tramo mencionado, debido a que son el 53,5 % de los vehículos. Por su parte, los carros particulares emiten el 4 % de las emisiones totales, según el estudio.

Los resultados acerca de las emisiones se lograron gracias a la implementación del modelo IVE y Copert 4, modelos que se basaron en información del conteo de tráfico y en un estudio de la flota que transita por la Ruta.

Los datos fueron proporcionados por dos estudios de la U.N., uno sobre el primer sector de la Ruta del Sol, que comprende la vía Bogotá-Facatativá-Villeta para la Corporación Autónoma Regional (CAR), y el segundo sobre las condiciones de consumo de combustible para Cormagdalena.

El investigador también se valió de información de Invías y de un concesionario que proporcionó datos sobre las marcas, tipo de vehículos, carga y configuración del camión. Así mismo “se realizó un acercamiento con varias empresas que facilitaron datos de varias GPS reales para la flota y con eso se pudo estimar una velocidad promedio de 80 km en cada uno de los sectores de la Ruta del Sol”, comenta.

“Según datos del Ministerio de Ambiente, a partir de 2011 la flota vehicular del país es Euro 3 y Euro 4, lo que indicaría que la calidad del aire que respiramos es buena. Sin embargo el problema de las emisiones de CO2 radica en que no tenemos una cultura de mantenimiento de los vehículos, por lo que tampoco sabemos cuánto se gasta en combustible”, asegura.

Pero, además de los problemas de mantenimiento, el ingeniero Parra afirma que la mejor solución para disminuir hasta en un 41 % los niveles de CO2 es el transporte multimodal, que contempla el modo fluvial o el modelo férreo.

“Los resultados muestran que si se diera en un escenario adecuado de carga multimodal se podría reducir cerca de 700.000 toneladas de CO2, un valor muy importante para cumplir las metas de los acuerdos de Colombia en la COP21 de París para la producción de emisiones”, señala el ingeniero.

Se estima que aunque los niveles emitidos de dicho contaminante disminuirían un poco, el modelo fluvial por el río Magdalena podría transportar 5 MM de toneladas de carga de las 45 MM que se transportan al año vía terrestre.

En contraste con el modelo fluvial, el modelo férreo sí tendría la capacidad de transporte de carga. El ingeniero señala que el mejor escenario contemplado es de dos viajes al día entre Puerto Salgar y la Zona Portuaria de Santa Marta, de esta manera podría asumir hasta el 80 % de la carga actual transportada vía terrestre.

El ingeniero asegura que si se implementa esta operación de transporte multimodal habrá muchas ventajas no solo desde el punto de vista ambiental sino también para la economía del país, contando solo la reducción del consumo de combustible para poder transportar los mismos volúmenes de carga.