Este reconocimiento fue entregado por el Consejo Superior de Ingeniería Química de Colombia, durante el XXVIII Congreso Colombiano de Ingeniería Química.
Este premio reconoce los aportes de una persona, empresa o institución en esta materia. En esta oportunidad, los profesores Juan Manuel Barraza y Nilson Marriaga fueron los encargados de recibir este reconocimiento en nombre de este Programa Académico.
Para tomar esta decisión se conformó un jurado calificador conformado por profesionales con un gran reconocimiento y trayectoria a nivel nacional, quienes escogieron a los ganadores entre seis nominados de la categoría personal, tres en la categoría empresarial y cuatro en la categoría institucional.
En la categoría personal el ganador fue el Ingeniero Químico Ramón Leonardo Latorre Chacón y en la categoría empresarial INDISA S.A.
Tres ciudades europeas muestran cómo el arte y la cultura pueden contribuir a crear barrios bellos, sostenibles e inclusivos.
La unión de ribavirina y remdesivir consigue eliminar de forma rápida el virus al inducir un exceso de mutaciones en su genoma que le impiden multiplicarse con eficacia.
La preocupación hacia los nano y microplásticos y su impacto en el medio ambiente y la salud de los organismos vivos ha aumentado considerablemente. Actualmente, no existe una metodología de análisis estandarizada para estudiar la presencia de estos, pero las autoridades ya comienzan a restringirlos. Además, existe un obstáculo clave que impide realizar las pruebas oportunas sobre los micro y nano materiales: la disponibilidad limitada de materiales caracterizados y trazables biológicamente. Por tanto, para poder continuar con esta línea de investigación es necesario disponer de partículas que sirvan de referencia, es decir, que conserven la naturaleza química del material y que tengan el tamaño de partícula adecuado.
AIMPLAS avanza en nuevas tecnologías para la descarbonización y la transición energética de la industria y el transporte, a través de dos proyectos de investigación y desarrollo financiados por el Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (IVACE+i) y los fondos FEDER.
El equipo del proyecto MMAtwo, financiado con fondos europeos, presentó una tecnología para procesar residuos de polimetacrilato de metilo y convertirlos en materiales utilizables en una segunda vida.
El biomaterial desarrollado por el ICMM-CSIC se combina con campos magnéticos para crear una matriz que permitirá la colonización por células neurales de las zonas dañadas de la médula espinal.