Países de América Latina y el Caribe anunciaron hoy su interés de impulsar un código internacional de conducta que oriente al mundo en la prevención y reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos.
La FAO ha apoyado a los países de la región a crear una nota de sustento técnico para el código, que será presentado durante junio al Comité de Seguridad Alimentaria Mundial (CSA).
La nota que será presentada al CSA contiene un marco metodológico para identificar los puntos críticos, prácticas y actores claves vinculados con las pérdidas y desperdicios.
Esta propuesta fue debatida por parlamentarios, autoridades de gobierno, representantes del sector privado, la sociedad civil y la academia de dieciséis países de la región durante el III Diálogo Regional de pérdidas y desperdicios de alimentos.
“Que una gran parte de los alimentos que se producen en el mundo acaben en la basura, cuando más de 795 millones de personas aún sufren hambre en todo el planeta, es un verdadero crimen”, dijo Julio Berdegué durante el diálogo regional.
De ser acogida por la comunidad internacional, la propuesta servirá como base para construir un instrumento jurídico no vinculante –como el que existe para el uso de plaguicidas - que permitirá a los países acercarse a la meta 12.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que propone reducir a la mitad las pérdidas y desperdicios per cápita al año 2030.
Identificando los puntos críticos en cada fase del ciclo de vida de los alimentos, los países podrán prevenir y reducir las pérdidas a lo largo de toda la cadena alimentaria. Al vincular estrategias locales, regionales y globales, servirá como una referencia para crear leyes y fomentar la cooperación entre las partes involucradas.
La región fortalece sus leyes e institucionalidad
Desde 2015, varios países de la región han incorporado esta temática en sus agendas legislativas y en su institucionalidad.
Durante el diálogo regional, Chile anunció la creación de un comité intersectorial sobre esta temática, con lo que se sumó a Argentina, Brasil, Costa Rica, Colombia, República Dominicana y Uruguay. Ecuador, Honduras y Paraguay ya han iniciado procesos similares.
En la actualidad hay cerca de 19 proyectos de ley relativos a las pérdidas y desperdicios que están siendo debatidos en los parlamentos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Perú y Uruguay.
Durante el dialogo regional, diez miembros del Frente Parlamentario contra el Hambre de América Latina y el Caribe participaron en una sesión especial de capacitación, y definieron una hoja de ruta conjunta para impulsar estas iniciativas.
“Se necesitan leyes que minimicen la pérdida de alimentos desde un enfoque multidimensional y preventivo, no sólo vinculadas a lo punitivo”, explicó la senadora mexicana Luisa María Calderón, Coordinadora General del Frente Parlamentario contra el Hambre.
Según la FAO, uno de los retos pendientes es avanzar no sólo en la reducción sino también en la prevención de las pérdidas y desperdicios en todas las etapas de la cadena de suministro de alimentos.
Un problema con múltiples repercusiones
Las pérdidas y desperdicios de alimentos tienen importantes implicaciones ambientales, económicas y sociales, e impactan la sostenibilidad de los sistemas alimentarios.
Mientras que en los países en desarrollo un 40% de las pérdidas ocurre en las etapas de poscosecha y procesamiento, en los países industrializados más del 40% de las pérdidas se produce en el comercio minorista y a nivel del consumidor.
Según la FAO, cada año se usan cerca de 1 400 millones de hectáreas de suelo para producir alimentos que no son consumidos, superficie mayor a la de Canadá e India en conjunto.
Un nuevo estudio confirma que 2023 fue el año más cálido registrado, con una temperatura media global cercana a la superficie de 1,45 °C por encima de los niveles preindustriales. Según el organismo, una vez más se han batido récords con respecto a los niveles de gases de efecto invernadero, las temperaturas en superficie y en los océanos, el aumento del nivel del mar y el deshielo.
Un informe de la Organización de Naciones Unidas indica que en 2022 se produjeron un total de 62 millones de toneladas de residuos electrónicos, lo que supone un 82 % más que en 2010. Según el documento, esta cifra va camino de aumentar un 32 % en 2030 si no se toman medidas.
La producción de RAEE crece cinco veces más rápido que su reciclaje, según el último Informe Mundial de Residuos Electrónicos de la ONU.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la Orden TED/167/2024, de 20 de febrero. Esta orden abre las puertas a subvenciones para el impulso de la economía circular en los sectores del textil, la moda y el plástico, con un total de 195 millones de euros disponibles (97.5 millones de euros por cada sector, respectivamente).
El mundo conmemora este 21 de marzo el Día de los Bosques. Te invitamos a conocer diferentes tipos de este ecosistema y sus características.
Reconciliarnos con la naturaleza o hacer que las ciudades recuperen el verde, sustituido hoy por el gris del hormigón y el acero, es una de las tareas que tenemos pendientes desde hace años en grandes urbes de medio mundo. Y a medida que tomamos consciencia de la importancia que tiene el medio ambiente en nuestro bienestar, surgen propuestas enfocadas hacia un futuro de granjas urbanas o azoteas verdes, por poner dos grandes ejemplos.