Durante este conversatorio se discutieron temas claves que deberían integrar una propuesta de agenda de Ciencia, Tecnología e Innovación, para consolidar este tipo de ciudades y para el desarrollo de regiones como la generación de instrumentos y herramientas que faciliten o permitan aprovechar la masa crítica de investigadores que existen en el territorio.
Así mismo, resaltaron la importancia de optimizar el manejo de los recursos y de pensar políticas que agilicen la producción de ideas, lo que implica la articulación entre actores públicos, privados, academia e instrumentos. Las ciudades van a jugar un papel clave en la dinamización del proceso de paz, pues su relación con las cadenas productivas agropecuarias se convierten en un dinamizador del proceso y de las oportunidades de empelo.
El tema de la ecoconstrucción se presentó como una alternativa tecnológica que favorece tanto la inclusión social como la reducción de gases efecto invernadero y donde se requiere resolver preguntas de investigación cuyos resultados se incorporen en los proyectos que se adelanten en las ciudades.
Se debatió sobre la importancia de construir un parque científico y tecnológico en Bogotá por parte de las universidades para crear una cultura en investigación; además, de contribuir con alternativas tecnológicas para que l sector privado las escale, se valoricen y se masifiquen.
Además se planteó la necesidad de pensar en soluciones para generar una economía circular y se analizó la posible articulación entre política pública de ciencia, tecnología e innovación, política de desarrollo urbano y política en modernización y de la producción industrial sostenible, incorporando el tema de ciudades y regiones como objeto de investigación e innovación.
Los expertos que lideraron el panel fueron Cristina Gamboa, directora Ejecutiva del Consejo Colombiano de Construcción Sostenible; Edgar Reveíz, miembro de la Academia Colombiana de Ciencias Económicslle; Fernando Viviescas, investigador y profesor de arquitectura de la Universidad Nacional; y Alfredo Bateman, investigador principal de la oficina en Colombia de ONU-Habitat, quien trabajó en el estudio sobre el Estado de las Ciudades en Colombia.
Un equipo científico del IEO-CSIC ha analizado cómo ha variado la distribución de 102 especies demersales en respuesta al cambio climático
La candidata a doctorado Emma Bullock estudia los impactos locales y globales de los cambios en los niveles minerales en las aguas subterráneas del Ártico.
Hasta ahora, se pensaba que los únicos organismos "fijadores de nitrógeno" eran los procariotas, como las bacterias.
Un chinche de 3 mm no registrado por la ciencia sería útil para controlar el crecimiento del maracuyá silvestre ("Passiflora foetida"), un tipo de maleza que en países como Australia es considerada como invasora pues obstaculiza el paso en las playas e impide el crecimiento de otras plantas autóctonas. Este insecto sería un controlador natural porque completa su ciclo de vida sobre la planta y se alimenta de las hojas causándoles daño.
El vuelo de los insectos, el camuflaje de los pulpos y la cognición humana son tres ejemplos de innovación evolutiva que se basaron, en parte, en eventos de duplicación de genes hace cientos de millones de años.
Un estudio pionero liderado por el CSIC analiza la exposición de los hábitats europeos al impacto de 94 especies de animales y plantas invasoras e identifica regiones críticas para la conservación.