Educación. Foto Pxhere.

Guillermo Santiago Sandi-Ureña tiene un doctorado en química de la Universidad de Clemson, Estados Unidos. Después de varios años de vinculación a la Universidad de Florida del Sur, actualmente labora en la Universidad de Costa Rica.

La visita fue coordinada desde la Vicedecanatura Académica con el apoyo de la Vicerrectoría Académica y el Departamento de Autoevaluación y Calidad Académica, como parte de la implementación de la nueva política de formación de la Universidad.

La agenda de trabajo fue diseñada sobre la base de las necesidades presentadas por profesores de la Facultad y las actividades incluyeron discusiones sobre la investigación que se realiza en el aprendizaje experimental en ambientes académicos universitarios y aspectos básicos de diseño de experimentos y una visita a laboratorios de la Facultad para analizar las prácticas actuales in situ. Al final, los asistentes trabajaron en una propuesta de rediseño de prácticas experimentales.

Estas actividades permitirán construir una ruta para la implementación de un piloto para la intervención de estos cursos de laboratorio (Etapa 3) en los próximos meses.

Con el propósito de recoger la idea del trabajo del profesor Santiago Santi-Ureña la Oficina de Comunicaciones de Facultad de Ciencias Natuales y Exactas lo entrevistó.

FCNE: ¿Por qué el aprendizaje centrado en el estudiante?

Santiago Sandi: La enseñanza es lo que hace el docente. Aprendizaje es lo que ocurre en el estudiante, el estudiante tiene que ser el actor fundamental de ese proceso.

FCNE: Pero no siempre ha sido así.

Santiago Sandi: Ese el reto. Desde el punto de vista de las ciencias de la educación, las ciencias cognitivas, el aprendizaje es más eficiente y más significativo cuando las personas están involucradas con lo que están aprendiendo.

FCNE: ¿Cómo reciben los docentes, que han dado clases de manera tradicional, cuando usted les presenta otras metodologías?

Santiago Sandi: Hay cierta reticencia al cambio, eso es natural en las personas, sienten desconfianza y se oponen a los cambios. Tanto los docentes como los estudiantes rechazan inicialmente, sobre todo si se trata de una imposición jerárquica, pero una vez tienen la oportunidad de vivir la experiencia terminan convenciéndose. Los estudiantes rechazan inicialmente porque consideran que tendrán más trabajo pero una vez se dan cuenta que pueden aprender mejor, ya no lo quieren dejar.

FCNE: ¿Pero los docentes también tendrán más trabajo, tendrán que preparar todo de nuevo?

Santiago Sandi: Hay una concepción equivocada de que la reforma educativa tiene que ser onerosa en términos financieros, que consume mucho tiempo, esfuerzo y dedicación de los docentes. Pero la reforma no tiene que ocurrir de la noche a la mañana. Si llevamos treinta años en este sistema que tenemos ahora, no podemos esperar cambiar la mentalidad de las personas de la noche a la mañana. La reforma puede ser progresiva. Lo importante es que los cambios rindan frutos y que las personas empiecen a tomarle el sabor y eventualmente pidan más.

Suena como una contradicción pero la persona docente es la más importante en el ambiente de aprendizaje experimental. Esto es así porque aunque el entorno de aprendizaje sea centrado en el estudiante es la persona docente quien media para que eso se cumpla o no se cumpla. La persona docente tiene que querer hacerlo.

FCNE: ¿Cómo se evalúa en este tipo de ambiente de aprendizaje?

Santiago Sandi: Las notas no desaparecen, pero poco a poco pierden importancia en el proceso de aprendizaje; son parte de la evaluación, pero no todo lo evaluable se puede traducir en una nota.

Las notas se han convertido en una especie de chantaje para que el estudiante haga las cosas, pero cuando quitas ese chantaje desaparece la motivación. El objetivo de estudiar es formarse y eso implica aprender. Lo ideal sería que la persona quiera aprender por el simple gozo de hacerlo, si nosotros logramos que el estudiante se motive por el curso, trabajará y aprenderá más y al final tendrá buenas notas sin que ellas sean su objetivo.